Ceremonia ritual por medio de la cual el profano es recibido en la masonería. Es un evento único en la vida del masón, por ello la Iniciación debe vivirse todos los días como parte de la experiencia existencial que sobre la base de tallar la piedra en bruto y construir nuestro templo interior de virtudes, porque es allí, en sus viajes y rememorando la experiencia, en que encontramos la mejor vía para hallar el sendero de la Luz.