Limosna entregada en el Saco de Beneficencia o Tronco de la Viuda, por cada masón al terminar la Tenida para las obras de beneficencia o de caridad.
Limosna entregada en el Saco de Beneficencia o Tronco de la Viuda, por cada masón al terminar la Tenida para las obras de beneficencia o de caridad.
El Nivel es el símbolo del Primer Vigilante. Representa simbólicamente la igualdad. A. Gallatin Mackey, opina que cuando se refiere a la igualdad no se trata de la igualdad social “que destruye todas las distinciones de rango y posición, y que engendra la confusión, insubordinación y anarquía, sino de esa igualdad Fraternal que, reconociendo la paternidad de Dios, admite como corolario necesario la hermandad del hombre... Bajo este plan, el Nivel nos enseña que todos los hombres son iguales, sujetos a las mismas flaquezas, las que persiguen el mismo término, preparándonos de esta manera para ser juzgados por la misma ley inmutable”.
El Mallete es una especie de mazo utilizado por el Venerable Maestro y por los Vigilantes, como símbolo del poder temporal o autoridad que poseen para dirigir los trabajos durante las ceremonias masónicas, mediante golpes sonoros emblemáticos, dados en sus respectivas mesas o tronos, generalmente sobre triángulos equiláteros de madera.
Un Landmark no es ni un símbolo, ni una alegoría, sino una regla. Se les define como reglas de conducta que han existido desde tiempo inmemorial --ya sea en forma de ley escrita o de tradición oral-- y que son coesenciales con la Sociedad Masónica, de forma tal que, en la opinión de la mayoría, son inmutables, y todo masón está obligado a conservar intactas, en virtud de sus compromisos más solemnes e inviolables.
En masonería en el simbolismo del proceso de perfección del Aprendiz masón, se utiliza estas tres sustancias: barro, yeso y carbón sobre la base de la libertad, el fervor y el celo.
El yeso es un material especialmente libre, porque al mínimo toque deja tras de sí una señal.
El carbón, es el más ferviente, porque ceden a él, en su estado de ignición, los más endurecidos metales.
El barro representa el celo, porque se emplea constantemente al servicio del hombre y nos recuerda que todos procedemos de él y a él, todos debemos regresar.